Cómo generar ventaja competitiva en los procesos de selección frente al resto de candidatos/as

Uno de los mayores quebraderos de cabeza entre las personas que están en búsqueda activa de empleo o aspiran a mejorar sus condiciones laborales, es cómo diferenciarse del resto de aspirantes. 

Conseguir aportar un valor añadido que diferencie nuestra candidatura no es sencillo, pero se puede hacer. Ser diferente puede suponer un punto de inflexión que marque distancias y decante la balanza a tu favor en un proceso de selección. El hecho de ser una persona proactiva, que muestra interés e inquietudes por seguir creciendo personal y laboralmente, tiene mucho valor para las empresas.

¿Cómo puedo diferenciarme de la competencia?

• Adelántate a las necesidades de la empresa. La especialización es muy valiosa a nivel profesional, pero también lo es la polivalencia. En un mundo tan cambiante, se valora muy positivamente que el personal de la empresa se muestre flexible y esté dispuesto a salir de su zona de confort. Formar al personal requiere tiempo y las empresas están concienciadas con la importancia de la formación continua de su personal. De igual forma, las personas trabajadoras también deben comprometerse con su mejora continua.

    Las personas en situación de desempleo, no deben detenerse. Durante ese periodo de tiempo tienen una buena oportunidad para adquirir nuevos conocimientos y competencias.

• Valora tu trabajo. No descartes o desprecies las funciones realizadas en determinados puestos de trabajo que hayas desempeñado. No sabes lo valiosas en qué medida pueden ser para la empresa a la que aspiras.

• La cantidad debe estar al mismo nivel que la calidad. Si decides abrir una nueva vía de profesional o de aprendizaje sé constante. La vía del aprendizaje o la experiencia adquirida en un puesto de trabajo son dos caminos perfectamente válidos. Aún así, deber tener en cuenta que el mero hecho de haber tenido una mínima toma de contacto con un área concreta no es suficiente para marcar la diferencia con el resto de aspirantes. Intenta buscar herramientas que te permitan ahondar más en ese ámbito y te proporcionen una visión más global y profunda en la materia.

• No todo es formación. Las competencias personales y profesionales han ido abarcando un mayor protagonismo en los últimos años, ya que son fundamentales para desarrollar de forma desenvuelta un trabajo. 

A esto, debemos sumar los valores que aportan las personas. La cultura de empresa está aumentando en nivel de importancia dentro de las organizaciones. Las empresas no sólo buscan a personas afines con su cultura, sino que también buscan a aquellas que aporten nuevos valores, sumando de forma positiva a dicha cultura para enriquecerla.

Existen muchas formas de diferenciarse de las personas que optan a un mismo puesto de trabajo. Busca la tuya y potencia aquello que te distinga.

     

Imágenes e infografías elaboradas con CANVA