Trabajar a partir de los 50 años

Las personas mayores de 50 años forman parte de un colectivo que se siente discriminado y vulnerable. Un dato objetivo que refuerza esta afirmación es que un alto porcentaje de ellos son personas paradas de larga duración. En los últimos años, este colectivo está realizando un gran esfuerzo, llevando a cabo un proceso de cambio de mentalidad para mejorar sus posibilidades laborales. Cada vez son más flexibles y se muestran abiertas a trabajar en otros sectores y puestos de menor cualificación. Estas personas valoran principalmente la estabilidad laboral y la conciliación frente a aspectos como el sueldo o la posibilidad de promocionar.

Además de las formas tradicionales de buscar empleo como es el envío de candidaturas a ofertas de empleo publicadas por diferentes medios, el envío de CV directamente a empresas o la canalización de la búsqueda de trabajo a través de personas conocidas, existen otras alternativas que se deben valorar y tener en cuenta.

Alternativas de trabajo para personas mayores de 50 años:

Programas de mentoring

El mentoring (también llamado mentoría) es la relación profesional por la que una persona con más experiencia y conocimientos ayuda, orienta y guía a otra con menor experiencia y la ayuda en su carrera profesional y crecimiento personal. El mentor o mentora, sirve de inspiración a la persona que tiene menos experiencia y le aporta otro punto de vista, vivencias, sabiduría y emociones que ayuden a las personas más inexpertas activar el motor que les conduzca a conseguir sus objetivos. Esta técnica está proliferando cada vez más, ya que las empresas se han dado cuenta de la riqueza y el beneficio que supone para el personal de su empresa y su futuro.

Coworking

Es un espacio compartido de manera física o virtual, donde acuden personas que ejercen una profesión de forma autónoma, por cuenta ajena o aquellas que tienen su propia empresa. El motivo de reunirse en estos espacios es la necesidad de disponer de recursos como un ordenador o conexión a internet pero no necesariamente se ciñe a estas alternativas. Dentro de estos espacios, se pueden aprovechar sinergias y  generar situaciones de colaboración entre profesionales aunque en un primer momento no exista ninguna relación laboral entre ellos. El contacto entre estos profesionales puede dar lugar al surgimiento de proyectos, ideas o colaboraciones muy interesantes. 

Oposiciones

La obtención de un puesto de trabajo público aporta estabilidad laboral y la posibilidad de conciliar tu vida laboral con la profesional. Hay oposiciones que resultan más sencillas de aprobar pero también tendrás que tener en cuenta que posiblemente habrá mayor competencia. En los últimos años, la oferta de puestos en la administración pública se han multiplicado, proporcionando una importante fuente de oportunidades laborales.

Autoempleo

La opción de crear tu propia empresa aprovechando todo el bagaje profesional obtenido a lo largo de tu vida laboral es una alternativa que no se debe descartar. Actualmente existe una tarifa plana para aquellas personas que se quieran dar de alta como autónomas durante el primer año, pudiéndose ampliar un año más en el caso de estar empadronada en municipios de menos de 5000 habitantes. 

Por supuesto, nunca se debe olvidar que no sólo la juventud tiene la capacidad de aprender, sino que todas las personas debemos tener el compromiso de actualizarnos y estar al día de las novedades que vayan surgiendo en nuestra profesión y aprender nuevas habilidades a través de la formación continua (capacitaciones tecnológicas, certificaciones, etc). INAEM ofrece formación para personas en situación de desempleo u ocupadas y la Universidad dispone de oferta formativa dirigida a personas mayores de 55 años, la Universidad de la Experiencia , que dispone de sedes en distintas localidades de Aragón.

Por último, no te limites a contactar únicamente con personas o entornos acordes a tu edad, adapta tu mensaje y dirígete a entornos jóvenes. La colaboración entre las distintas generaciones es fundamental, ya que tanto unas como otras pueden aportar aspectos positivos para evolucionar y crecer profesionalmente. En el caso de las personas con mayor edad, pueden aportar experiencia, contactos o una mayor capacidad para liderar proyectos. Las personas jóvenes aportan su habilidad digital y su "hambre" de aprendizaje.

Todas las personas podemos aportar y no debemos desaprovechar la oportunidad de hacerlo.

Imágenes elaboradas con CANVA